Qué es el periodo de carencia en una hipoteca y cómo pedirlo

Si tienes una hipoteca contratada y por alguna razón necesitas reducir la cuota durante un tiempo o posponer su pago puedes recurrir a solicitar un periodo de carencia en tu hipoteca.

¿Qué es el periodo de carencia en una hipoteca?

El periodo de carencia en una hipoteca es un tiempo durante el cual no pagas la cuota de tu hipoteca o sólo pagas una parte. Hay dos tipos de periodo de carencia de hipoteca:

Carencia de hipoteca de capital

Si tu hipoteca sigue el método de amortización francés, que es el más habitual, estará compuesto por una parte de intereses, y otra de devolución del capital que el banco te ha prestado. Si pides un periodo de carencia de hipoteca parcial o de capital lo que pagarías durante ese tiempo serían los intereses. 

En el caso de este tipo de periodo de carencia de hipoteca no olvides que la deuda no se está reduciendo y, por lo tanto, cuando termine el periodo de carencia, como la deuda no ha ido disminuyendo, la cuota mensual de tu hipoteca será más alta de lo que habías pactado en la contratación.

Carencia de hipoteca total

Esta es la opción a la que recurren personas que, por la razón que sea, no pueden permitirse pagar su cuota de hipoteca. En la carencia total no pagas ni intereses, ni deuda.

Si decides solicitar un periodo de carencia de hipoteca total tienes que tener en cuenta que los intereses de tu hipoteca se irán acumulando y, por lo tanto, la deuda crecerá. Acabarás pagando más por el capital que pediste.

¿Cómo solicitar un periodo de carencia de hipoteca?

Para pedir un periodo de carencia de tu hipoteca tienes que contactar con tu banco para negociar una novación de hipoteca, que es una renegociación de los términos de una hipoteca pero con la misma entidad, sin cambiar de banco.

Al solicitar un periodo de carencia de hipoteca tu banco hará un estudio de riesgo para valorar si puede concedértelo.

¿Cuánto cuesta solicitar un periodo de carencia de hipoteca?

Al pedir un periodo de carencia en tu hipoteca tienes que tener en cuenta dos gastos:

• Por un lado, los gastos de formalizar una nueva escritura ya que, al realizarse una novación, tendréis que volver a pasar por notaría y registrar la escritura.
• Por otro lado, los costes a largo plazo y es que acabarás pagando más por tu hipoteca porque la deuda no se estará reduciendo y los intereses se aplican sobre el capital que aún queda por devolver.

El periodo de carencia en una hipoteca autopromotor

Hay un tipo de hipoteca en el que es habitual que los primeros años exista un periodo de carencia parcial en el que solo paguemos los intereses; la hipoteca autopromotor. Como ya te explicamos en este artículo sobre las hipotecas autopromotor, muchas entidades ofrecen un periodo de carencia en los primeros años de la hipoteca en el que sólo pagamos los intereses.